Alumnos y alumnas

Alumnos de Educación Infantil y NEE

La Educación Infantil, según recoge la Ley Orgánica, 2/2006 de Educación (LOE), constituye la etapa educativa que atiende a niños/as desde el nacimiento hasta los seis años de edad. Esta etapa es quizás la de mayor influencia en las fases posteriores, aunque ya que sus objetivos apuntas más al desarrollo integral de la persona y a que los contenidos se trabajan desde un punto de vista globalizador, la mayoría de los niños/as con necesidades educativas especiales, pueden generalmente, desenvolverse con relativa comodidad.

Resulta fundamental que conozcamos las principales necesidades educativas del alumnado, de la etapa de infantil y cuales son las principales medidas de atención para estos alumnos/as.

La Ley Orgánica, 2/2006 de Educación (LOE), modificada parcialmente por la Ley Orgánica 8/2013 para la mejora de la Calidad Educativa, en su artículo 71 define el Alumnado con necesidades específica de apoyo educativo, como alumnos/as que requieren una atención educativa diferente a la ordinaria, por presentar necesidades educativas especiales, por dificultades específicas de aprendizaje, TDAH, por sus altas capacidades intelectuales, por haberse incorporado tarde al sistema educativo, o por condiciones personales o de historia escolar, y puedan alcanzar el máximo desarrollo posible de sus capacidades personales, y en todo caso, los objetivos establecidos con carácter general para todo el alumnado.

La etapa de Educación Infantil construye la etapa en la que el niño alcanza los logros que servirán como base de su evolución posterior. Los recursos de la escuela deberían trabajar para conseguir el adecuado estímulo en los distintos ámbitos y así llegar a un desarrollo equilibrado del alumno/a.

A través del trabajo, los maestros nos encontramos en una posición privilegiada para observar la evolución del alumnado, y poner en marcha las medidas necesarias en caso de detectar alteraciones en dicho proceso.

Con estas medidas, aplicadas en edades tempranas, podemos tratar de eliminar o al menos paliar las dificultades, por lo que la colaboración entre los distintos profesionales y la relación con la familia resultarán indispensables.